Después de Madrid ya nada fue igual,
El club Atlético River Plate cambió el paradigma para siempre.
De ser superado por su clásico rival hasta maltratado en lo psicológico después de la etapa más oscura en la historia del club, llegaron las buenas.
Y son más que buenas por que hoy el hincha puede sacar pecho y decir sin miedo al mismo que, tiene la victoria más importante a nivel clubes.
Después de Madrid, el club Atlético Boca Juniors vivió todo lo contrario que a su clásico rival de toda la vida.
Juega cada partido distinto y aún no puede despertarse de esa pesadilla que ellos titulaban antes de jugarse como la final de finales.
Pero como todos sabemos en el periodismo nacional y puertas para dentro del club, volvieron a sacar a la vista su mayor victoria fue contra El Madrid y justamente el Real, que todos sabemos que es el máximo campeón de Champions (13) y que son dudas es de los mejores equipos de la historia.
Pero acá no estamos para hablar del Real o de cualquier otro equipo que pelea el lote del mejor de la historia.
Acá estamos para hablar de lo que fue para el fútbol, no solo nacional sino mundial es final única.
Después de Madrid, ese club llamado Boca no volvió a jugar un clásico de la misma manera que lo venía haciendo.
Puede parecer raro, para el hincha, para el lector, pero lo único raro fue que después de ese 09/12/2018 ese club cuyos colores son azul y amarillo, respeto al rival más allá de que si fuese un clásico (ex súper clásico).
Por que todos sabemos que la rivalidad es lo más lindo del fútbol, rivalidad sana, no esa locura de querer matar a alguien pero partido (que si habrá pasado en nuestro país), es un partido diferente, distinto, es un partido que no importa si vos venís último y ellos vienen primero, vos lo querés ganar.
Y en ese ganar también está tu muestra de grandeza sin olvidar de dónde salió cada uno,
Después de Madrid, se jugaron 7 partidos oficiales (liga local, copa local, copa internacional) entre los clubes más importantes de Argentina, victoria más victoria menos, se notó que un club podía perder pero no le cambiaba nada, en cambio al de la vereda de enfrente, ya nada será igual.
Llegó a pasar que en un partido por copa argentina (torneo más federal del país) Boca no patee al arco, buscando una excusa hacia el respeto y hacia “te gane la pelea táctica”, pero River a eso le interesa, quiere ganar todos los clásicos, todos los partidos. Si es goleador y jugando buen mejor aún.
Nunca se sumó al lote de ganarlo jugando mal,
Jamás le interesó eso, será por eso mismo ¿que antes costaba más después de la década del 90? Será por eso que en los mano a mano venían costando más de la cuenta? La respuesta ese toma del lado que uno quiera.
Pero de lo que jamás dudaremos es que después de Madrid nunca pero nunca nada fue igual, ni siquiera el mejor partido del mundo.