El fútbol contemporáneo cada vez es menos un deporte, un deporte de equipo, cada uno tenía sus valores y táctica para ganar sus partidos, ahora es una empresa, es decir un negocio, donde los jugadores mandan y los jefes son los que acatan las ordenes, no vaya ser que los empleados se enfaden y no hagan nada. Todo empieza desde el marketing, el principal objetivo de los grandes clubes, generar la máxima pasta a través de jugadores buenos que quieren mandar en el vestuario, si se le exige más se enfadan y no hace nada, que el entrenador no le saca al campo pierden mucho dinero y aficionados al club, que provocaría una explosión mediática y social que hace presión a los altos cargos del club, si juegan claramente no harán mucho ya que el entrenador les exigieran más de lo que hacen, y al jugar mal en vez de echar a los futbolistas , echaran al entrenador como si es el culpable de todo.
Ya es demasiado tarde para que el fútbol cambie y no sea un negocio, se pagan exageraciones por jugadores que no valen ni la mitad de lo que pagan, pero claro es mejor reforzar tu propio club que el contrario, también la publicidad que da ese jugador todas las marcas le querrán y es un gran beneficio para el club y recuperar el dinero invertido y dar ganancias.
Esto hace que los equipos pequeños no tengan muchos medios de ingresar dinero, el mayor ingreso es de la tv y de las taquillas, las clausulas no pueden ser muy altas ya que los jugadores pedirían un salario más grande y no se lo podrían permitir, donde también esos mismos futbolistas quieren aprovechar las oportunidades de poder ir a un club más grande y de tener un salario más grande, sino presionaría al presidente para que le vendan y se pondría en modo rebeldía, como paso con muchos jugadores.
Ahora todos los clubes para ganar sus partidos utilizan la picardía y un estilo que le complica al rival, ahora no tienen su propia táctica, su manera de jugar lo utilizan los favoritos a ganar el partido, se pasan horas analizando al rival cosa que antes no podían utilizar, y aun así no le sirven para nada. Ahora el fútbol depende del dinero e intentar jugar de todas las tácticas posibles para complicar al rival y no lanzarse a ganar con su propio estilo.