La salida de Neymar del Barcelona es todavía una herida abierta para las dos partes. Para el brasileño, porque no termina de encontrar su lugar en el PSG, en el que a poco de llegar parece ya dispuesto a partir. Para los catalanes, porque no le perdonan el presunto desprecio de haber querido irse hacia una liga que consideran menor. Y en medio de ese contexto, el delantero, que suena fuerte como posible refuerzo del Real Madrid en un futuro cercano, dio un paso hacia lo que se asemeja mucho a una declaración de guerra.
Neymar, la actual estrella brasileña del PSG, ha presentado una demanda judicial contra el FC Barcelona reclamando la segunda parte de la prima de fichaje que pactó con el FC Barcelona antes de marcharse al PSG. Neymar, que se ha clasificado para la primera final con el PSG, exige 26 millones de euros más un 10% de intereses, según ha avanzado el diario ‘El Mundo’. Esto supone un total de 30 millones de euros.
El Barça no se ha quedado parado y ha contraatacado con una denuncia por un valor de 75 millones de euros en la que exige al jugador el total de los ingresos derivados de su renovación más una multa por daños y perjuicios.
En agosto pasado, el Barcelona se había negado a pagar la segunda parte de la prima de renovación pactada con Neymar, luego de que se supiera su partida al PSG, que finalmente se consumó cuando el club francés pagó la cláusula de rescisión de 222 millones de euros.
Los catalanes consideraron que no correspondía hacer el pago, que vencía el 31 de agosto, porque el jugador había decidido irse. Para el Barcelona, Neymar incumplió el contrato que habían firmado, donde se preveía que el vínculo se extendiera hasta 2021.
Recordemos que como muestra de buena voluntad el Barcelona, que entiende que Neymar incumplió de forma unilateral el contrato, llegó a depositar ante notario la cuantía pendiente de la prima de renovación de Neymar a la espera de conocer la decisión final del brasileño.
Aunque el Barça reservó el montante total de la prima de renovación por si acaso el jugador decidía a última hora quedarse, los azulgranas finalmente no abonaron el dinero al jugador al conocer su decisión de salir del club. El PSG salió en defensa del jugador cuando se anunció el fichaje y “lamentó la actitud del Barcelona” con respecto a las trabas legales que impuso.
Si Neymar sale vencedor del proceso judicial, el coste final de la estancia del brasileño en el Barça superaría los 230 millones de euros, muy lejos de los 57,1 anunciados en primera instancia por Sandro Rosell y su directiva.
Y por si fuera poco, Florentino Pérez sigue moviendo sus fichas porque quiere ver a Neymar vestido de blanco dentro de dos años y, si puede ser, en el mercado de verano, mucho mejor. ¿Cómo terminaría la relación Neymar-Barcelona si el brasileño firmara por el conjunto merengue?