Desde un punto de vista superficial, podríamos afirmar que el fútbol le ha dado a Colombia momentos de alegrías y tristezas. Desafortunadamente más del segundo que del primero, pero afirmar que es solo eso sería muy injusto. El fútbol le ha aportado a Colombia la idea de país, de unidad ,de colombianidad, de identificación con su bandera y un patriotismo que antes de los noventas me atrevo a decir no existía.
El fútbol nos dio la convicción de que es posible lograr grandes cosas y que ese pesimismo o cretinismo mejor causa mucho daño, se hicieron hasta célebres frases como siempre nos faltan cinco centavos para el peso, solo por resaltar una que fastidia el alma y el corazón, sobre todo si conocemos el esfuerzo de nuestros seleccionados por representarnos de la mejor manera, pero encontramos ahora la otra cara de la moneda del cretinismo al triunfalismo, ahora nos polarizamos, donde he escuchado esa frase bueno el fútbol nos brindó y brinda la oportunidad de sentirnos orgullosamente colombianos.
Es nuestro embajador en todo el mundo y como todo en la vida con buenos y malos momentos entonces la invitación es aprender a disfrutar nuestro fútbol, respetarlo y acompañarlo en su proceso evolutivo, que nos ha servido para entrelazarnos como colombianos, desde todas las regiones del país, la siguiente tarea y ojalá sea exitosa para el fútbol es colocar la idea de nacionalismo por encima de los regionalismos, consolidando de esta manera la idea de país.
A finales de los ochentas y principios de los 90s gracias el futbol pudimos decir y sentir la tricolor, con sus triunfos y fracasos es nuestra selección la que a puesto a vibrar y emocionar a más de 45 millones de colombianos, gracias fútbol gracias selección Colombia.